El negocio inmobiliario -15

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(José Saramago. La Caverna)


La operación inmobiliaria concentra valores ciudadanos (plusvalías) …. se apropia de la vida urbana, vampirizando la auténtica ciudad y la desnaturaliza convirtiéndola en un simulacro privatizado.

El negocio inmobiliario configura la ciudad como un aglomerado de guetos sin estructura, punteado de una constelación de cavernas de distinto tamaño.

La caverna es una concentración masiva de vida urbana, privatizada y reconvertida en un negocio….la caverna tiende a la expansión y a la reproducción…en la medida que la caverna se dilata engulle vida urbana vaciando la ciudad de su energía vital, concentrando la actividad ciudadana y sustituyéndola por un simulacro…..la caverna chupa la sangre de la ciudad convirtiéndola en un mercado.

El gueto es un conglomerado de vida urbana encasillada en un fichero…..tiende con naturalidad hacia un desarrollo cualitativo, pero es continuamente devorado por la caverna…..la vida ciudadana es forzada a la uniformidad; lo discreto y diverso se convierte en continuo y uniforme….la capacidad elástica residual de la gelatina resultante es constreñida por rigidizadores esquemáticos, eso inmoviliza las vibraciones internas y la convierte en alimento idóneo para la caverna….el agujero negro se traga a la galaxia urbana.

Una caverna es una concentración de capital….su conversión en espectáculo está en proporción directa con su tamaño….todo negocio inmobiliario es una caverna……el beneficio se obtiene por apropiación de vida urbana (plusvalías).

La caverna destruye la ciudad absorbiéndole la vida urbana…..su metabolismo consiste en una apropiación de valores urbanos que se refleja en la elevación del precio del suelo con el consecuente empobrecimiento general y en una sustitución mercantilizada de estos valores por simulacros desnaturalizados.

La vida urbana se almacena en los guetos lista para ser consumida por las cavernas.

El vampiro anhela el alimento y la reproducción…..la caverna tiende a la expansión cuantitativa, a mayor concentración de capital mayores beneficios, y a la proliferación, cuántos más negocios mayores ganancias…..cuánto más grande sea el negocio inmobiliario con más ansia y glotonería absorbe las plusvalías urbanas…..la proliferación de cavernas agota la ciudad, agrava las contradicciones de los ciudadanos, desintegra la sociedad poniendo en competencia sus elementos internos y fuerza la ciudad al canibalismo…..la ciudad se consume y desaparece tragada por una miríada de cavernas….cuando la infección acabe con el huésped las cavernas se devorarán unas a otras……la ciudad finalmente se extingue auto-consumiéndose….

El cáncer inmobiliario destruye el organismo y con él a sí mismo….el afán cavernario es suicida…..el negocio inmobiliario es in-sostenible, una vez devorada la ciudad muere de inanición.

Existen dos principios formativos en la ciudad…uno femenino y otro masculino, el primero lo representa la chabolista, el segundo el urbanista idólatra.

La chabolista construye ciudad a partir de redes de indicios, utiliza configuraciones orgánicas y mantiene los principios de permanencia y transformación cualitativa.

El urbanista idólatra construye lo urbano a partir de sistemas esquemáticos, utiliza configuraciones euclidianas y su principio es el desarrollo cuantitativo, favoreciendo todo lo posible la aparición de fenómenos cavernosos.

El principio femenino es persistente, el principio masculino es destructivo….la concepción que tiene la chabolista de la ciudad es sostenible, la del urbanista idólatra es in-sostenible.

El urbanismo impone por la fuerza sus esquemas a la chabolista…..utiliza la policía contra el asentamiento…..el urbanismo moderno destruye la vida urbana con el cáncer cavernario e impone sus métodos destructivos a punta de pistola.

La ciudad se construye imponiendo por la violencia el metabolismo in-sostenible de la caverna.



José Saramago. La Caverna

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